Faltan pocas horas para la tercera boda de la Duquesa de Alba. Su bisabuelo, Jacobo Luis Francisco Pablo Rafael Fitz-James Stuart y Ventimiglia, octavo duque de Berwick y decimoquinto de Alba, no asistirá al enlace porque falleció en 1881. Este dato parece que no consta en el juzgado de Primera Instancia de Murcia que ha dado 10 días de plazo a Jacobo para que él, o sus herederos, comparezcan para tramitar un expediente que elimina el gravamen que pesa sobre una finca cedida hace casi 150 años a su arrendatario.

La resolución judicial revela que la finca se encuentra ubicada en una pedanía de Murcia y sobre ella pesa una carga de un euro y medio que debe pagar el propietario. El gravamen, que fue establecido por el bisabuelo de doña Cayetana en 1878, como así figura en el Registro de la Propiedad de Murcia. El documento se hace constar que el noble cedía el dominio de la finca, reservándose una pensión anual.

El expediente fue iniciado a instancias del actual poseedor de la finca, M.M., que trata de que el juzgado de Primera Instancia la declare libre del “impuesto”. El edicto judicial dice que el bisabuelo de la Duquesa o sus herederos, tienen “a su disposición en la Secretaría del Juzgado una copia de la demanda de liberación de cargas y los demás documentos presentados por el demandante”. Ahora es Cayetana Fitz-James Stuart, quien podría aceptar la demanda u oponerse a ella.