La Audiencia Provincial de Murcia ha ratificado el internamiento en un centro educativo, durante doce meses, a un niño molinense de 14 años que pegó a su madre en dos ocasiones y rompió muebles. En la sentencia se expone que el denunciado causó varias lesiones a su madre el pasado 19 de abril en su vivienda de Molina de Segura. Según el escrito, el chico le dio a su madre “patadas y puñetazos, resultando la denunciante a consecuencia de estos hechos con contusiones y hematomas en brazo y mejilla”. La segunda agresión tuvo lugar en mayo, “cuando la lanzó sobre la cama y le propinó patadas en los brazos y en las piernas, resultando con lesiones en cara, cuello, ambos brazos y múltiples eritemas en muslos y piernas”.
El Juzgado de Menores de Murcia condenó al menor a 12 meses de internamiento en un centro educativo, como autor de un delito de malos tratos en ámbito familiar y de violencia habitual. Además, el agresor había sido condenado el 12 de abril por un delito de violencia doméstica a la medida de diez meses de internamiento semiabierto. Medida sustituida por la imposición de la medida de libertad vigilada durante ocho meses.
En su recurso ante la Audiencia, el denunciado alegó que había sido condenado sin pruebas, y se quejó de que el juez lo hubiese considerado culpable acogiendo como cierta la versión de la víctima. El chico añadió que su madre tiene “una tortuosa relación con su padre por su custodia, ya que él ha manifestado su preferencia por permanecer con éste y no con ella”. Finalmente la Sala ha desestimado su recurso en una sentencia en la que se afirma que el juez de Menores tuvo en cuenta no sólo lo declarado por la víctima, sino también otros datos que corroboran los hechos denunciados, como los partes médicos de lesiones, en los que se recogen las heridas que sufrió la madre.