La Audiencia Provincial de Murcia ha ratificado la sentencia del juzgado de lo Penal número seis de Murcia que, el pasado mes de septiembre, condenó por un delito de abuso sexual a un joven de 19 años, que durante el juicio aseguró que el manoseo de las nalgas a una transeúnte con la que coincidió en la calle «fue una broma». Los hechos se produjeron en una calle de Murcia el 23 de agosto de 2011, cuando el chico siguió en bicicleta, a corta distancia, a la denunciante. «El acusado trató de dar cierta conversación, para, en un momento dado, dando suelta a sus pulsiones sexuales, de forma sorpresiva, tocó las nalgas durante unos instantes, manoseándolas, cesando su conducta ante la reacción de la mujer», según la resolución judicial. Según la sentencia, el joven «está diagnosticado de trastorno antisocial de la personalidad y leve retraso mental, que afecta ligeramente al control de sus impulsos», siendo condenado a la pena de seis meses de multa, con una cuota diaria de seis euros.

El condenado, en su recurso de apelación ante la Audiencia, negó que se hubiera producido «manoseo» alguno y que «se trató de un tocamiento fugaz y momentáneo», por lo que, en su opinión, lo que realmente se había cometido no era un delito de abuso sexual, sino una falta de vejación injusta. Al desestimar el recurso, la Audiencia declara que «el cuerpo humano es la expresión física más personal y digna de protección que toda persona tiene, manifestación de su dignidad y de su libertad y sobre la que no puede ni debe soportar injerencias o ataques indeseables o no consentidos».