La Caja de Ahorros del Mediterráneo tiene un futuro incierto tras su intervención por el Banco de España en julio de este año. En marzo ya solicitó un rescate al Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria para su nacionalización parcial o temporal. La Confederación Empresarial de la Provincia de Alicante, COEPA, ha destacado que el FROB apoya a día de hoy a la caja alicantina, esto supone una garantía para inversores, clientes y trabajadores.

COEPA explica en un comunicado que esa tranquilidad asegura “la normalidad en la operativa diaria y solvencia” de la entidad y Obra Social, así como un “incremento de su aportación al mercado crediticio”. Además, desde la confederación han mostrado su preocupación por la escasa financiación que “ahoga a las empresas”. Por eso han solicitado una “mayor rapidez” en la reforma del mercado financiero para “reactivar el crecimiento económico y el consumo privado”. COEPA considera de gran importancia el Corredor Mediterráneo ferroviario, en el que han jugado un papel fundamental: organizaciones empresariales, cámaras de comercio y gobiernos autonómicos de Andalucía, Murcia, Comunidad Valenciana, Cataluña y Baleares.

OFERTAS POR LA CAM

Si desde hace semanas Botín era el favorito para hacerse con la CAM, Caixabank toma la delantera y moverá ficha en la adquisición de la caja. El Consejo del banco catalán, presidido por Isidre Fainé, presentará una oferta no vinculante que le dará acceso a analizar las cuentas de la CAM para decidir posteriormente si presenta otra oferta vinculante. El lunes 26 de septiembre finaliza el plazo de interés por la compra de la entidad alicantina, y aún figuran entre los posibles compradores Banco Santander y BBVA, entre otros. El Banco de España espera cerrar la venta de la CAM antes de las próximas elecciones del 20 de noviembre.